sábado, 29 de agosto de 2009

esas veces que sentís que estás listo para dar libre Calle con cacho castaña

la calle corrientes abarrotada de los ángeles de hace 2 años que nunca terminan de serlo. la calle lavalle llena de los turistas y rascas de siempre. y los puestos de revistas con las indicaciones más precisas, para variar.
"agarrás por esta, hacés una cuadra, doblás a la izquierda, cien metros y ahí lo tenés. el mejor. dos plasmas, todo tenés. lo mejor"
una panchería rica en licuados varios calientes y, como lo había prometido, una gran plasma, y el partido. pagué mis 7 pesos por un jugo de naranja y me entregué al circo.
Después de 2 gritos un señor estacionó su bandeja en mi mesa y ahí se quedo. Cuando salí del partido ví que se le había caido un poco la ensalada de frutas y, te juro, me partió el corazón. era un abuelito total. le ofrecí varias veces ir a buscarle servilletas, y hasta inventé favores que le podía hacer. después de unas cuantas negaciones me empezó a preguntar por el partido. "si, los estudiantes son buenos. hace poco ganaron algo importante, en serio puuuuu"
me contó que de chico, a los 19, era el capitán en su equipo del bachiller. que vino del perú y, sin olvidarlas, cambió sus tierras por un título de medicina en la facultad de buenos aires. hizo los 6 años de un tiron y le daba clase a sus compañeros. dió conferencias por todos lados y lo persiguen de los laboratorios porque, entre íntimos, es el mejor médico del mundo. porque el no receta, nono. el prepara. en serio, vos por ahí no me crees, pero es el mejor medico del mundo, cura todo. y así todo el resto del partido.
era de esos viejos copados, entre puntano y patch adams, entre favaloro y sandino. me contó de su vida, de sus estudios, de lo mal que se juega al futbol ahora y de que el era el capitán de su equipo, a los 19 años en el bachiller. que era el mejor médico del mundo, y que además lo perseguian los medios, porque el atendía todo, no solo el cancer, los tumores y los quistes. y en sus cuarentaypico años de ejercicio tan solo tiene un certificado de defunción, y que le dicen "el doctor de los pobres" y "el salvador de los casos perdidos". qué es pastor hace 20 y que con dios se puede pelear al maligno. que justo justo la semana pasada le cambió las pilas a su reloj, y que no le importa que sea trucho, porque total para qué querés uno mejor? igual tiene otros relojes que le regalaron, pero justo ahora se le viene a parar. seguramente está sucio.
me dijo que estudie y que lo haga con vocación porque sino no sirve. que me ponga y que me lleve lo que me lleve, y que esté tranquilo, que los nervios hay que dejarlos afuera, porque por ahí es donde entra el maligno.
vimos el partido del pincha y un rato de argentinos, y entre charlas de vida con un desconocido total que no encontró sus panfletitos para dejarme y un jugo de naranja bastante caliente, me volví a enamorar de buenos aires, de la gente que alguna vez invadió el obelisco y de esas fotos para turistas.
me dijo que se llamaba Narvaez, que había dado cátedra y hecho radio, que tenía ochentaipico y que sí, parecía mucho más joven porque tenía el secreto para rejuvenecer y que, si algún día andaba por ahí, nos ibamos a volver a encontrar. me dio la mano y se perdió entre las sombras de lavalle y suipacha.-

1 comentario:

Vick dijo...

Vos lo contás y me muero de ternura del viejo... ahora, si yo hubiese (o hubiera) estado ahí me hubiese (o hubiera)roto las pelotas que el tipo no parara de hablarme